- La evidencia de los Evangelios no es consistente. Después de su arresto, ¿fue Jesús llevado ante el Consejo (evangelios sinópticos) o simplemente interrogado por el Sumos Sacerdote (Juan)? ¿Tuvo esta escena lugar en la noche (Mc/Mt/Jn) o en la madrugada (Lc)? ¿Fue Jesús interrogado sobre su identidad divina (sinópticos) o sobre sus discípulos y sus enseñanzas (Juan)? ¿Se decidió darle muerte en este momento (Mk/Mt), o no (Lc), o más temprano (Juan)?
- Un “juicio” formal ante el Consejo en pleno durante la primera noche de la Pascua (de acuerdo con la cronología de los sinópticos) es poco probable, aunque esto no descarta una sesión más temprana del Consejo para discutir el caso de Jesús, tal como describe Juan 11:45-53. Ya sea que haya habido una reunión formal del Consejo a una hora más temprana o no, cualquier interrogatorio después del arresto de Jesús seguramente se limitó al Sumo Sacerdote y sus asociados más inmediatos.
- El escenario propuesto por Juan en el cual Jesús fue llevado ante el Sumo Sacerdote y fue interrogado sobre sus discípulos y sus enseñanzas tiene más sentido en un contexto anterior a la resurrección que la pregunta sobre su divinidad en los sinópticos, una disputa que se ubica mejor después de la resurrección. Las autoridades se tuvieron que haber preguntado qué reacción tendrían los discípulos si Jesús fuera ejecutado. Había que determinar qué hacer con ellos también. Alguien decidió (correctamente) que los discípulos no representaban una amenaza violenta.
- Si la acusación de “blasfemia” fue presentada en contra de Jesús antes de su muerte, no pudo haber sido entendida en el sentido de los debates que siguieron a la resurrección entre miembros de la Iglesia y otros judíos sobre si Jesús había sido elevado como un segundo dios, lo cual violaría las convicciones monoteístas judías. Por el contrario, “blasfemia” en el contexto de la actividad histórica de Jesús tiene que ver con la presunción arrogante de tener la autoridad de hablar y actuar como el enviado de Dios, criticando a los líderes del Templo y poniendo en riesgo la destrucción del Lugar Sagrado.
- Como el incidente es bastante común en los libros del Nuevo Testamento y representa en cierta manera un episodio embarazoso para los primeros cristianos, parece probable que en verdad Pedro negó cualquier asociación con Jesús.

